La ergonomía ha pasado a ser una de las decisiones primordiales a tener en cuenta.
El objetivo principal de la ergonomía es crear espacios de trabajo adaptados al cuerpo humano para que no padezcas molestias en las actividades diarias que se realizan en la cocina. Cada persona tiene sus propias características físicas y, por consiguiente, sus propias necesidades.
Una planificación de cocina inteligente se refleja en aspectos como el espacio de almacenaje y la comodidad de las acciones. De esta manera, encontramos varias posibilidades para personalizar al máximo tu cocina y conseguir los mejores estándares en confort y comodidad.
Los sistemas de alturas permite implementar zonas de trabajo desde 66,2 cm hasta 110,2 cm, en tres alturas de carcasa diferentes. Los muebles de tu cocina deben responder a tus necesidades para adaptar los movimientos a criterios ergonómicos y funcionales. Una altura de trabajo correcta es igual de importante que una buena solución de almacenaje.
Con los muebles bajos XL conseguirás un 10% más de capacidad de almacenaje y una mayor ergonomía en la superficie de trabajo.
Lo ideal será crear un triángulo de trabajo para favorecer la distribución de los espacios. Separar la zona de cocción, almacenaje y zona de lavado, creando un triángulo para mejorar y acortar los recorridos dentro de la cocina. Procura reducir los obstáculos para conseguir unos desplazamientos y movimientos cómodos y funcionales.
ACCESORIOS FUNCIONALES
Escoger los accesorios adecuados a tus necesidades será clave para conseguir una cocina funcional y práctica. El sistema de reciclaje o las columnas extraíbles de almacenaje te ayudarán a mejorar los movimientos en la cocina. Además, una correcta organización del interior de los cajones favorece su orden y facilita tenerlo todo a mano. Los accesorios extraíbles para los armarios esquineros también ayudan a mantener unos gestos cómodos en la cocina.